Viendo mi
calendario, veo que existe este año una coincidencia en estas Pascuas, con el
Pesaj de las fiestas Judías. Y más precisamente nuestra Pascua de Resurrección,
con el último día del Pesaj …
Esto me
motivo a buscar coincidencias y encontré un artículo del 2018 “El ultimo día
del Pesaj” escrito por el Prof. Alan Cooper, Decano del Seminario Teológico
Judío (JTS), de donde saque esta última parte…
«Así como el
primer día celebra la redención del primer exilio, el último día celebra la
redención futura de nuestro estado final de exilio. Los dos están íntimamente
conectados, el principio y el final de un proceso con Dios, en la redención
futura mostrando maravillas ‘como en los días de tu éxodo de Egipto’ (Miqueas
7:15).»
Y qué futuro es,
una era marcada por una transformación completa de la sociedad y la naturaleza.
El gobernante, inspirado por el espíritu de Dios, no gobernará por la fuerza,
sino con «sabiduría y conocimiento, consejo y valor, devoción y reverencia a
Dios» (Isaías 11: 2), ejerciendo «justicia para los humildes» (11: 4) Las
bestias previamente carnívoras pastarán pacíficamente junto a su presa
anterior, y las serpientes venenosas ya no amenazarán (11: 6-8). Esta dramática
transformación representa nada menos que un nuevo Éxodo -desde un mundo lleno
de guerra, opresión y sufrimiento a uno caracterizado por el buen gobierno, la
justicia y la paz.
El octavo día de
Pesaj es una ocasión para redirigir nuestra mirada del pasado al futuro, y la
haftará (que algunos israelíes recitan en Iom Ha’atzma’ut) nos alienta a
imaginar y anhelar un mundo mejor, más seguro y más saludable. Sin embargo,
como nos advierte el rabino Schochet, «nuestra conciencia debe traducirse en
acción». No podemos quedarnos de brazos cruzados y esperar a que la justicia y
la paz se desarrollen solas. Debemos luchar por ellos, «confiados, sin temor,
porque Dios es nuestra fuerza» (Isaías 12: 2)
Es así que
nosotros recordamos la vida, pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor
Jesucristo, en la semana Santa. Para festejar el domingo de Pascua, que por El,
hemos sido rescatados de la muerte del pecado, para nacer a una vida nueva. Y
que por la Misericordia Divina, podremos llegar a alcanzar la vida eterna.
Tantos judíos
como cristianos, depositamos toda nuestra confianza en el Señor. Él es el Señor
de la vida, El liberó al pueblo de la esclavitud de Egipto, mostrando con su
brazo su poder y para nosotros los cristianos, entregó a su único hijo, en la
mitad de los tiempos, para nuestra Redención.
Pero tanto unos
como otros, en este domingo 4 de abril, viviremos estas fiestas, imaginando un
mundo mejor. Pero también teniendo la seguridad que nosotros, los que creemos
en Dios, debemos ser parte del cambio, poniendo nuestra Fe en acción, y así con
nuestros actos, mostrar al mundo que el amor de Dios, es la verdadera fuerza de
la transformación…
Pidamos juntos
al Señor nuestro Dios, que transforme los corazones endurecidos de los hombres,
para que estas fiestas se conviertan en el PASO, hacia un mundo mejor…
“Chag Pesach sameach” =
(Feliz fiesta de Pascua) “Felices Pascuas de
Resurrección”
Shalom aleijem= (La
Paz sea con vosotros)